Este viejo dicho que escuche desde que era niño no ha perdido vigencia y se mantiene a través del tiempo. Hace poco leíamos en las páginas de este semanario Nro. 5595, una nota de nuestra compañera Yanel Sánchez, (Pag.19), sobre el ahora llamado puente viejo, sobre el río Santa Lucía. Y nos vino a la memoria cuando hace un par de años, se había comenzado a rumorear que se iba a construir un nuevo puente sobre el río, que hoy es una realidad. Hubo gente que decía que el viejo puente iba a dejar de ser usado en beneficio del nuevo, incluso levantaron firmas porque iba a perjudicar a la ciudad, desviando el turismo de argentinos que pasaban y dejaban sus buenos pesos. Nosotros nos mantuvimos firmes y decíamos que eso no iba a suceder como no ha sucedido porque los turistas y la mayor cantidad de gente siguen usando el ahora llamado viejo puente. El nuevo se iba a construir como una alternativa cuando los desbordes del río, cortaran la ruta pero el viejo iba a seguir siendo de utilidad suprema. Y estábamos en lo cierto, porque todo lo que dijimos en su momento se ha cumplido. Había personas que no sabemos qué fin perseguían que estaban en contra de eso y trataban de poner al pueblo en contra de la nueva obra por intereses personales. Un puente que para el tiempo que transcurre era viejo pero que se necesitaba una nueva alternativa de paso, porque estaba perjudicando a los propios santalucenses. Hay mucha gente que trabaja en San José, sobre todo en las Colonias y que tenían que hacer una gran travesía para llegar a su lugar de trabajo así como las empresas de transporte interdepartamental que debían realizar muchísimos kilómetros con el consiguiente perjuicio. Todo eso se subsanó gracias al nuevo puente carretero sobre el río santa Lucía. Con respecto a la ecología, en todos los grandes países hay puentes muchos más grandes y no sabemos exactamente lo que puede causar, no estamos en contra de eso pero pensamos en bien del progreso del país y de su gente. Fuimos los únicos que tratamos de explicar a la gente que no iba a perjudicar en nada a la ciudad, como ha sucedido en la actualidad y todos lo pueden ver. Hoy se sigue utilizando al viejo puente como un nexo entre dos departamentos amigos y mucha gente concurre como antaño a la ciudad de Santa Lucía a proveerse de comestibles, ropa, y cuanta mercadería transita por la ciudad, como a realizar trámites de rutina o como simple paseo, incentivando a los comercios locales. No la ha perjudicado en nada a Santa Lucía, porque los turistas siguen pasando, el transporte de línea interdepartamental, pasa por donde siempre pasó; un acceso que lleva directamente a la ciudad, no puede ser dejado de lado. Por eso lo del título. «No hay mejor testigo que el tiempo».
(Alcides Toribio).-
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