Martin Beceiro es Psicomotricista en el taller de experiencias oportunas del Centro
Materno Infantil. El mismo consiste en un espacio de intercambio entre niños y niñas
de 0 a 24 meses, donde asisten con sus familias y la idea es aprender jugando e
intercambiar sobre crianza con los adultos.
“El taller de experiencias oportunas es un espacio para las familias de 0 a 24
meses que es una vez por semana de un taller, para el intercambio de juego,
intercambio sobre la crianza, encontrarse con otros padres, otras madres con
pares de la edad y aprender jugando y es algo especializado para ellos para esas
edades y bueno, lo compartimos son 8 talleres por semana y en verdad tenemos
un total de 126 cupos que ya estamos próximo a llenarlos, por suerte, este año con
todo este tema de la pandemia la familia y la comunidad lo siente y estamos super
agradecidos”.
“Lo rico del taller es que se intercambian las experiencias y uno va aprendiendo de
los otros y ven las etapas de desarrollo que están atravesando, qué hacen, qué no
hacen y de acuerdo a que cada niño es un ser singular entonces si bien su
desarrollo va a ser parecido al de otro, va a tener áreas en las cuales va a avanzar
más, otras menos. La idea es acompañar el desarrollo de los niños y niñas”.
El taller se divide en dos ciclos, uno que inicia en marzo con 16 talleres seguidos
hasta finales de junio y después se hace una pausa de julio por el tema del
invierno y se retoma en agosto, durante el mes de pausa se hacen evaluaciones
del desarrollo con las psicólogas y se intercambia con las familias sobre el proceso
que van realizando, cómo están sus hijos. En agosto comienza la segunda parte
del ciclo con otros 16 talleres más.
“De acuerdo a la edad es muy complicado visualizar qué tipo de juego hacen.
Tenemos una sala montada para ellos que tiene un espejo gigante con todo lo que
tiene que ver con la imagen corporal a estas edades, el piso es de alfombras para
que ellos se puedan mover libremente nos descalzamos al entrar por todo lo que
implica estar descalzo a estas edades es importante lo sensorial, partimos desde
ese lugar y ahí vamos creando”, sostuvo Beceiro.
El equipo se compone del psicomotricista, dos educadoras, psicólogas y
maestras.
“En verdad, hace un tiempo desde la pandemia por esta parte hemos notado que
se anotan bebés pequeños, como recién nacidos, y eso está bueno, se ve
también de familias jóvenes como de familias muy mayores que son primerizos,
que tienen varios hermanos o que ya vinieron acá”, sentenció el psicomotricista.
Durante la pandemia “el taller estuvo reducido en una hora y cuarto y fue como
muy corto y ahora estamos retomando el taller largo, dura dos horas y media. En
verdad empezamos con un taller de una hora y cuarto y le vamos agregando más
tiempo a medida que se van adaptando, que se van sintiendo cómodos y nosotros
también y creamos esa grupalidad donde, bueno, conversamos de muchas cosas
entorno a la crianza. Cuando vemos que hay días que tienen muchas ganas de
jugar, jugamos más, hay días que quieren estar más calmos entonces cambiamos
los materiales. La idea es que la propuesta vaya variando taller a taller, no es algo
estructurado”, dijo Beceiro.
Por inscripciones dirigirse a Rocha esquina Chile o por whatsapp al 092080687 de
lunes a viernes de 8:30 a 18:30 horas
.
En cuanto a educación inicial la directora Claudia Salgueiro mencionó que las
clases iniciaron el lunes 7 de febrero y los estudiantes se encuentran en fase de
adaptación.
“Las inscripciones el año pasado no las promocionamos porque ya con la
población de experiencias veíamos que cubrimos los cupos, entonces no se hizo
una campaña de inscripción para educación inicial, de todas maneras, al día de
hoy estamos recibiendo todos los días inscripciones y obviamente están en lista de
espera.
El lunes 7 arrancamos con lo que nosotros llamamos como periodo de adaptación,
y es importante ver quienes sostienen en este periodo, recién para marzo
tenemos un panorama más claro”, explicó Salgueiro.
El lugar está adaptado especialmente para ellos, con los estantes bajos para que
los niños puedan ir a buscar sus juguetes y volverlos a guardar.
En cada salón la decoración ocupa cada rincón que llena de colores el espacio,
además el tiempo que se le nota es de pura dedicación, en algunos al ingreso se
ven decoraciones donde cada una lleva el nombre de los alumnos.
Seguro que cada adulto que ingrese siente nostalgia de volver a la niñez.
Sadia Baudino
Deja una respuesta